Juego parado

Los sentimientos pasan en muchas ocasiones por la sorpresa que causa ver algo no conocido. La efervescencia de una luz, con unos cuantos cromas, fundidos o encadenados; el sonido que envuelve unas guitarras eléctricas plenas de melancolía, un piano y una batería finalista; y la voz poco ortodoxa y evanescente pueden llegar al paroxismo sensual de 18.000 personas. Coldplay para el juego con afán de poner paz, evadiéndonos del presente histórico y trasportándonos a una dimensión. Tal vez a una parecida a la que Eduardo Punset nos propone viajar en Cara a cara con la vida, la mente y el universo (El viaje a la felicidad). Con esta gente no valen usos. Son gente impar, tienen el gancho de la personalidad y el valor de ir adelante. A los que quieren ser toreros se les pide eso en cantidades inagotables. La comunidad Flickr sabe mucho de valentía; y de reporterismo, fue la primera en relatarnos gráficamente el concierto del martes. Amigo sufridor, el manual por una vez me lo dejé en casa esta mañana. Recordé entonces que ayer conocí al Director de 20 Minutos y recuperé las ganas de ser periodista algún día. No os podéis imaginar la humildad y cordialidad de JAMS. Repitió en varias intervenciones el “yo estoy aquí para aprender”. Claro que no lo dijo tanto como Pedro J. Después, cuando salía del metro para remontar el paseo que me lleva todas las mañanas a la oficina pensé en Carmen Sánchez Carazo, una mujer que defiende con obstinación los derechos de las personas para que la convivencia no sea un quimera griega. A Carmen la conozco virtualmente gracias a mi reporter favorita, que tiene un blog...